sexta-feira, setembro 15, 2006

PUSKAS SE ENCUENTRA EN MUY MAL ESTADO

El ex jugador del Real Madrid Ferenc Puskas "se encuentra en muy mal estado", según aseguró hoy el legendario guardameta del llamado "equipo de oro" húngaro y antiguo compañero suyo Gyula Grosics.

El ex goleador húngaro, de 79 años, continúa en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Kútvolgyi, a la que fue trasladado hace días, en Budapest, donde se encuentra internado desde hace seis años como consecuencia del Alzheimer."Ya no tiene contacto con el mundo, no reacciona a nada, está acostado y no abre los ojos", explicó Grosics en referencia al estado en el que encontró a su compañero esta mañana en su visita al Hospital Kútvolgyi."Los médicos tampoco dicen nada. Lo único que se sabe es que el estado de Puskas es estable, pero no cambia", añadió el ex guardameta, quien señaló que acude regularmente en la UCI y prometió que seguiría visitando a su compañero.Grosics agregó que Puskas se encuentra muy bien arropado por su esposa Erzsébet, de quien dijo que "está junto a su cama todos los días, durante dos o tres horas, desde hace seis años", a pesar de que "en los últimos meses ya no podían comunicarse, porque Puskas no es capaz de hablar".El ex guardameta húngaro confirmó las declaraciones realizadas por otro compañero en las que aseguraba que "el estado de Puskas mejoró un poco después de haber sido trasladado a la UCI, pero nada más".En los últimos días, la familia informó de que considera la enfermedad del célebre deportista como "asunto personal" y pidió a la prensa la debida prudencia para garantizar "la máxima tranquilidad" al enfermo y a los suyos.El ex madridista, que marcó 159 goles en los 179 partidos disputados con la camiseta blanca, entre 1958 y 1966, y que jugó 85 veces en la selección húngara, recibió en enero de 2006 la condecoración "Campeones de Europa" de la UEFA.Durante su etapa en el club blanco, Puskas ganó seis campeonatos de Liga y dos Copas de Europa, y en la actualidad es recordado por su participación en la final de la Copa de Europa de 1960, en la que marcó cuatro de los siete goles que el Real Madrid le endosó al Eintracht de Francfort (7-3).
Queda de uma estrela, é assim a vida!

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